Disculpas

Algunos amigos me han recriminado que ayer en el blog, con motivo del día del Padre, reprodujera los datos de Claudio Risé en su libro "El padre" que en su momento tamien incluí en "Leonardo da Vinci y su Códice por el Liderazgo". Pido perdón por ello.

De una parte, como decía el primer ministro Disraeli, "hay pequeñas mentiras, grandes mentiras y estdísticas". Que el 90% de los sin techo no tengan padre en la familia no significa necesariamente que no contar con tu padre (que ya es una lástima en sí misma) te convierta en disfuncional o delincuente. Los afectos encuentran muchas vías para ser cultivados.

Por otro lado, soy un ferviente convencido del inmenso poder del desarrollo humano. No hay predestinación, sino plasticidad del cerebro, moldeado a nuestra voluntad. El hecho de ser huérfano, o hijo de padres separados, o ser parte de una familia numerosa no predispone a nada.

Gracias a aquellos que me han dado la oportunidad de aprender de un error como el de ayer.