Mi cumple

3 de julio de 2008. Cumplo 44 años. Si Julio Iglesias cantaba “33 años, nada más o media vida”, creo que estos 44 deben ser la mitad de la mía.

Anoche la celebración de la clausura del Programa de Alta Dirección de la Extremadura Business School fue todo un éxito. Las cuatro horas y media de Burgos a Cáceres merecieron de sobra la pena. El acto de entrega de diplomas de la I Promoción en el Palacio de Carvajal (con la única higuera milenaria del mundo, en un bello contraste de historia y naturaleza) fue una maravilla. Nos dio la bienvenida el director del Programa, Dr. Carlos Ongallo. En nombre de los participantes en el programa intervino D. Ángel Quesada, de INSA-IBM. Posteriormente, un servidor intervino en nombre de los profesores. Un vídeo resumió lo que han sido estos ocho meses de actividad. Entrega de diplomas y las alocuciones de D. Baldomero Lago, Cónsul de España en Estados Unidos y representante de la UTAH Valley University, D. Fernando Luque, Rector Magnífico de la Universidad de Extremadura y D. Ángel Franco, Consejero de Administración Pública y Hacienda de la Junta de Extremadura.

Fue un auténtico placer volver a los directivos y empresarios que han invertido tiempo y dinero en formarse en este programa.

Más tarde, cenamos en un estupendo restaurante del centro histórico de Cáceres, amenizados por guitarra clásica.

A las 12 en punto de la noche, Alejandro me recogió con el coche en la Plaza del Ayuntamiento y emprendimos camino de vuelta a Burgos (esta vez, en 3 horas y 40 minutos). Pude descansar un poco y dormir el resto de la noche.

Esta mañana he tenido un par de sesiones de coaching de lo más agradable. Dos directivos con enorme capacidad y compromiso, conocedores de sus fortalezas y dispuestos a aprovechar a tope sus oportunidades de mejora.

He tenido algo de tiempo para pasear por la Catedral y me he regalado, en la tienda de la misma, un azulejo de “preguntas y respuestas” de la Madre Teresa que Calcuta, que dice lo siguiente:

- ¿El día más bello? Hoy
- ¿El obstáculo más grande? El miedo
- ¿La cosa más fácil? Equivocarse
- ¿La raíz de todos los males? El egoísmo
- ¿La distracción más bella? El trabajo
- ¿La peor derrota? El desaliento
- ¿Los mejores profesores? Los niños
- ¿La primera necesidad? Comunicarse
- ¿Lo que me hace más feliz? Ser útil a los demás
- ¿El peor defecto? El mal humor
- ¿El sentimiento más ruin? El rencor
- ¿El regalo más bello? El perdón
- ¿Lo más imprescindible? El hogar
- ¿La sensación más grata? La paz interior
- ¿El mejor remedio? El optimismo
- ¿La mayor satisfacción? El deber cumplido
- ¿La fuerza más potente del mundo? La fe
- ¿Las personas más necesarias? Los padres
- ¿El sentimiento más bello del mundo? El amor

Gracias a las decenas de personas que me habéis llamado y enviado correos electrónicos felicitándome por mi cumpleaños, desde Australia hasta Venezuela. Me habéis hecho muy feliz. Da gusto tener amigos así por todo el mundo.

A las 2 de la tarde he quedado a comer en el Restaurante Landa con Carmelo Sánchez, de ESIC. Hemos compartido jamón, morcilla y un lechazo con ensalada deliciosos. A eso de las cuatro y media, camino a Bilbao.

Carmelo y yo habíamos quedado con Santiago López, de la Cámara de Comercio de Bilbao. Hemos preparado el desayuno de trabajo de mañana y tomado juntos una cerveza.