Los días de descanso
en la Riviera Maya se están acabando y esta “disciplina” llegando a su fin.
En general, he
acertado considerablemente en los libros que he leído estos días (excepto uno
de estrategia u otro de meditación a los que no voy a hacer mala publicidad, el
resto me han ayudado mucho). De los últimos, Las Navas de Tolosa, de Francisco García, en la edición del VIII
Centenario. He aprendido que la de Las Navas es una de las pocas “batallas
campales” (a campo abierto) de la Reconquista, y en general de la Edad Media, y
que el rey de Castilla, con el apoyo de sus aliados (los reinos de las Españas)
la planteó como una Cruzada, con el apoyo papal. Un episodio de nuestra
historia indebidamente desconocido y que este voluminoso texto (más de 500
páginas) explica de maravilla.
Un Twitter de Lola
Sánchez (ideacoaching) nos recordaba ayer las principales ideas de un libro
importante de Seth Godin, gurú del marketing viral, Sobrevivir no es suficiente. Un texto de hace 10 años, pero de
plena actualidad. Gracias, Lola, por ello.
Entre las “leyes” de
Godin están las siguientes:
1.
El cambio es el nuevo
paradigma. En vez de pensar en el trabajo como una serie de tiempos estables
interrumpidos por momentos puntuales de cambio, las empresas deben reconocer el
trabajo como una serie de cambios con momentos excepcionales de estabilidad.
2.
Si tú y tu compañía no sacáis
ventaja del cambio, el cambio os vencerá.
3.
La estabilidad es una mala
noticia para las organizaciones. Necesitan del cambio para sobrevivir.
4.
El cambio presenta nuevas
oportunidades para conseguir otros mercados. También representa oportunidades
para que los individuos avancen en sus carreras.
5.
Las compañías que introducen
productos y servicios que representan cambios significativos, encuentran el
éxito rápidamente.
6.
Las empresas que aprecian el
cambio atraen personas que también fomentan el cambio. Las que temen al cambio,
atraen a su vez a gente con la misma actitud.
7.
Mucha gente teme al cambio.
El temor al cambio es absolutamente racional, pero el no querer cambiar
realmente nos puede conducir a situaciones peores.
8.
Redefiniendo el significado
del cambio, muchas organizaciones pueden cambiar la dinámica de “el cambio
equivale a la muerte”, por “el cambio equivale a oportunidad”.
9.
La forma en que las especies
se amoldan al cambio es evolucionando.
10. La compañías pueden evolucionar si la dirección
lo permite.
11. Una vez que una empresa evoluciona regularmente y
sin esfuerzo, el cambio ya no es percibido como una amenaza sino como un activo,
ya que determina la extinción de la competencia.
12. Un éxito fulminante ocurre cuando un feedback
positivo refuerza un éxito anterior.
13. Estos feedbacks te enseñan lo que está
funcionando y, lo que es más importante aún, te permiten cambiar lo que no está
funcionando.
14. Cualquiera en la empresa puede reinventar lo que tú
haces en paralelo, aumentando de forma dramática la velocidad de innovación
dentro de la empresa.
15. Bajo presupuesto, bajo riesgo, y pruebas reales
son lo que nos dan las mejores posibilidades de un alto retorno de nuestra
inversión.
16. La actitud de tu empresa con respecto al proceso
de cambio es mucho más importante que los cambios actuales que esté
experimentando.
17. Si tienes personal que no abraza esta postura, te
harán perder velocidad y posiblemente te harán tomar malas decisiones.
Tal vez lo que nos cuenta Seth Godin nos parezca sentido común, pero evidentemente no es práctica común (en caso contrario, no desaparecerían tantas empresas). O asumimos el cambio
como algo natural, o no tenemos nada que hacer. Hace 800 años, como ahora,
tenemos que afrontar la realidad y plantarle cara. O generamos el destino que
deseamos, o alguien lo hará por nosotros.
Mi agradecimiento y
admiración a quienes abrazan el cambio en lugar de instalarse en la rutina. De ellos es la supervivencia...