Lunes muy interesante, de reuniones de
vanguardia. La temporada 2014-2015 se presenta llena de enormes oportunidades.
He estado leyendo el informe de Time (del que
se ha hecho eco Marca) con el valor de las selecciones. La gran favorita, La
Roja, vale 671’4 M € (916 M $); detrás se sitúan Alemania (604 M €) y Brasil
(502 M €). En el resto del Top Ten, Francia (443 M €), Argentina (421 M €),
Bélgica (374 M €), Inglaterra (359 M €), Italia (347 M €), Portugal (319 M €) y
Uruguay (234 M €). Las dos “Cenicientas” de las 32 son Australia y Honduras,
con un valor de 22’8 M € cada selección.
Si el fútbol fuera una ciencia exacta, en el
primer partido del grupo, España (671 M €) no tendría problemas frente a
Holanda (nº 11, con un valor económico de 223 M €), porque vale el triple. Ni
lo tendría contra Chile (nº 16, con un valor de 149 M €), y no digamos frente a
Australia, porque su equipo vale 30 veces el de Oceanía.
Sin embargo, “fútbol es fútbol”, como decía
Bujadin Boskov, y el reto de Van Gaal es que “la naranja mecánica” (la de
Robben, Sneijder y Van Persie) pueda derrotar a la actual campeona del Mundo.
En la pasada Eurocopa, el equipo holandés fracasó; dos años antes, llegó a la
final (precisamente frente a La Roja).
Precisamente, la labor de un coach (Del Bosque,
Van Gaal) es básicamente generar sinergias: que la suma de los talentos
individuales sea mayor en su conjunto. Porque entre los seres humanos, la suma
es sinérgica o antisinérgica, pero nunca neutral.
Atención también a la dependencia de un solo
jugador: Cristiano Ronaldo vale 107’7 M € sobre el total de 319 M € de la
selección lusa (33’54%). En el Mundial
2010, suponía el 40% del valor de Portugal. Secar a CR7 será clave si Alemania,
Estados Unidos o Ghana quieren tener opciones. Leo Messi vale 129’7 M €, y toda
Argentina, 421 M €. Por tanto, el jugador argentino del FC Barcelona vale el
30’81% de los albicelestes. Algo similar, aunque menor, ocurre con el germano
Özil o el brasileño Neymar.
¿Qué debe gestionar el seleccionador, en
nuestro caso Del Bosque, para conseguir que su grupo humano sea un equipo de
verdad y por tanto obtenga sinergias –que juntos valgan más que cada uno por
separado? Básicamente, no se trata de Capacidad (la aptitud y la actitud de
todos y cada uno de los jugadores de La Roja está más que contrastada), sino de
Compromiso, entendido no como “ganas” (como el valor en la mili, se le suponen
a los 23 jugadores de la selección), sino como energía al servicio de un
proyecto, del proyecto de ganar el Mundial por segunda vez consecutiva.
El Compromiso es la suma de cuatro energías:
física (el riesgo es sentirse exhaustos, teniendo en cuenta que la mayoría de
los titulares de La Roja han jugado Liga, Copa y Competiciones europeas
prácticamente hasta el final, y que varios de ellos son veteranos), mental
(España juega con una identidad; como ha declarado Vicente del Bosque, no son
talibanes de una idea), emocional (no se siente, en principio, la misma
ilusión, consiguiendo el primer campeonato que el segundo) y de valores (el
seleccionador ha escogido a los jugadores cuyos valores personales encajan más
en los del equipo).
Será una competición gloriosa, apasionante,
muy entretenida.
Tenemos un maravilloso mes por delante.
Y como “arma secreta”, varios jugadores se
han llevado el libro ‘Atrévete a motivarte’ a Brasil. Hoy he visto la foto de Iker
Casillas, el capitán, con este libro rojo de la motivación junto a Jorge
Carretero. Muchas gracias a los dos por este regalo tan especial.
Si La Roja juega motivada, ganará el
campeonato y nos motivará, y mucho a sus seguidores.