Festivos
como el de hoy presentan la innegable ventaja de que no pones el despertador.
Esta mañana deliciosa de sol, sesión de entrenamiento deportivo con la fabulosa
Irma Valderrábano, marca de referencia en el Coaching natural de cuerpomente, y
mientras escribía un artículo para la prensa especializada, he estado
escuchando el nuevo CD de Melendi (que precisamente me había recomendado Irma):
‘¡Quítate las gafas!’. Sumamente poético, con once canciones fabulosas. Entre
ellas, ‘Flores de agua y plomo’ (www.youtube.com/watch?v=TAofa-agqQc),
‘Destino o casualidad’ (www.youtube.com/watch?v=ZrMWi-Fnnow),
‘Un amor tan grande’ (www.youtube.com/watch?v=A6jzdckzfkM) y ‘Yo me veo
contigo’, que explica nuestra historia desde 1979 www.youtube.com/watch?v=jwMTzEynZ7I
Muy apropiado para recordar lo que hemos vivido desde la Constitución. “Escribiendo
descubrí/ lo que es realmente importante”. Gracias, Melendi, por estos temazos. Y a ti, Irma, por la sugerencia.
He estado
leyendo ‘The Gray Rhino. How to recognize and act on the obvious dangers we
ignore’ (El Rinoceronte Gris. Cómo reconocer y actuar frente a los peligros
obvios que ignoramos) de Michele Wucker. La autora es una de las ‘Jóvenes
líderes de Davos’ (2009) y presidenta del World Policy Institute de Nueva York.
Vive en Chicago y ha escrito para el New York Times, la CNN, el Washington Post
y el Wall Street Journal.
Como
ejemplos de “rinocerontes grises”, nos propone la crisis argentina de 2001 o la
griega de 2011. Frente al “cisne negro” de Nassim Nicholas Taleb (lo altamente
improbable), un “rinoceronte gris·” es una amenaza muy probable a la que no
hacemos frente. La burbuja que dio lugar a la crisis de 2008, los huracanes
Katrina y Sandy, las tecnologías digitales con su disrupción, la caída de la
URSS, los conflictos de Oriente Medio… Todo ello son rinocerontes a los que ves
venir.
Las cinco
etapas de un rinoceronte gris son:
- Negación
(denial), que no por casualidad es la primera etapa del duelo (Elizabeth
Kubler-Ross).
- Confusión (muddling)
- Regateo
(bargaining)
- Pánico
- Actuar
demasiado tarde
Los
oráculos del mundo moderno (como el Foro Económico de Davos) suelen alertar de
las grandes amenazas (por ejemplo, la escasez de agua en las próximas décadas).
El problema suele ser la falta de voluntad política y social para atajar el
problema. El neurocientífico francés Olivier Oullier lo llama
“emorracionalidad”, la extraña combinación de motivaciones emocionales y
racionales que nos conducen a un exceso de confianza. Moraleja: no temas estar
equivocad@ y corregir el curso, reduce tu entusiasmo (euforia), las
predicciones son complicadas (pero hay que atenderlas), atiende a la sabiduría
de otras personas, podemos aprender (si fallas, enmienda). Como buenas
prácticas, la resolución de la crisis en Islandia, las “Lehman Sisters” (las
mujeres son más prudentes en general).
Michele un
presenta una “taxonomía de rinos grises”:
- La
verdad inconveniente (el cambio climático)
- El rino
a la carga (Siria)
- El rino
recurrente (las pandemias, la crisis financiera)
- El
meta-rino (la desigualdad, la exclusión de género)
- Los
rinos de dominó y quimera (precio de los alimentos, escasez de agua,
volatilidad)
- El nudo
gordiano (Israel-Palestina)
- La
destrucción creativa (Kodachrome)
- Los
rinos no identificados (la Inteligencia Artificial)
Cuidado
con el cuerno del rinoceronte, nos advierte Michele Wucker. Se tiene
(falsamente) por afrodisiaco, cuando debe tomarse con precaución. A veces,
forzar las cosas no es lo más conveniente.
En la vida
real, muy pocos humanos mueren al año asesinados por rinocerontes (al parecer,
los hipopótamos son más peligrosos), si bien los rinos en su embestida alcanzan
los 60 km/h. No tienen depredadores naturales, si bien están en peligro de
extinción porque los humanos los cazan y ocupan sus espacios naturales. Quedan
unas 29.000 especies de rinoceronte (a principios del siglo XX había medio
millón en África y Asia), la gran mayoría (20.000) blancos y unos 5.000 negros;
de Sumatra deben quedar 100 y de Java unos 60.
Por su
alto impacto, igual que debemos ser precavid@s con los “cisnes negros”
(altamente improbables), debemos:
1.
Reconocer a los rinocerontes
2.
Definirlos (DAFO)
3. No
quedarnos quietos (ni negación, ni inacción, ni pánico). Atiende al “momento
eureka” (Aha moment).
4. Una
crisis no se puede desperdiciar (mejor antes que después; nunca demasiado
tarde).
5.
Conviértete en “cazador/a de rinos” y mantenlos a raya.
Interesante
el concepto de “rinocerontes grises” como complemento a los “cisnes negros” en
la asunción de riesgos.
Esta tarde
he ido a ver ‘La llamada’, una película muy interesante que no te debes perder.
Mañana te hablaré de ella.