El supremo arte de vivir mejor


En esta deliciosa Semana Santa, hoy hemos aprovechado para visitar Cartagena. Una ciudad de 200.000 habitantes en una comarca, Campo de Cartagena, de 400.000 (es la 22ª localidad de España y la 16ª zona metropolitana). Fundada por Asdrúbal el Bello en el 227 aC sobre un asentamiento ibérico (Mastia), tuvo su apogeo durante el Imperio Romano con el nombre de Cartagho Nova. Fue uno de los enclaves bizantinos en la Península (Carthago Spartaria), destruida por los visigodos y entró en decadencia hasta el siglo XVI. Renació por la importancia estratégica de su puerto (al que escribió Cervantes), vivió la insurrección de 1844 y la rebelión cantonal de 1873. Durante el siglo XX basó su economía en la explotación de cinc, plata y plomo de su sierra minera. En la actualidad es uno de las tres bases navales más importantes de nuestro país (con Rota y Ferrol) y destaca en construcción y reparación de barcos, refinado del petróleo y exportación de aceite de oliva, frutas, hortalizas, esparto, vino y productos metálicos. Es muy interesante como emergente destino turístico (Cartagena, ciudad de tesoros); sus procesiones de Semana Santa (desde 1663), con esculturas de Salzillo y Benlliure y mantos y bordados del XVIII y el XIX, fueron declaradas de Interés Turístico Internacional en 2005. Cartagena cuenta con cinco Universidades y ocho Museos importantes. Son personajes ilustres de Cartagena, además de su fundador Asdrúbal y Aníbal (que partió de la ciudad para tomar Roma), San Basilio (discípulo de Santiago), San Isidoro, el obispo Licinio de Cartagena, el poeta Hazim al-Quartayanni, el explorador Juan Fernández (descubridor de Neuva Zelanda), el liberal Juan Antonio de Padua Florián, el compositor renacentista Sebastián Raval, los héroes de Trafalgar Antonio de Escanio (oficial) y Baltasar Hidalgo de Cisneros (almirante), Isaac Peral (1851-1895), el zoólogo Marcos Jiménez de la Espada, el arquitecto Víctor Beltri, el militar y ministro José Luis Beigbeder, el torero “Gavira”, Ramón Serrano Suñer (fundador de la ONCE y de la Agencia EFE), el poeta Antonio Oliver (generación del 27), la escritora Carmen Conde (primera mujer en la RAE), el historiador del arte Alfonso Pérez (director del Museo del Prado), Joaquín Navarro-Valls, Arturo Pérez-Reverte, Eduardo Zaplana, Federico Trillo, Ortega Cano y el bailarín José Carlos Martínez (director artístico de la Compañía Nacional de Danza).
Hoy he leído ‘El arte de vivir mejor, de Pedro Martínez Ruiz. Para el valenciano Pedro Martínez Ruiz (1977), licenciado en informática y en ADE, lo que da sentido a la vida es “cruzar los límites autoimpuestos y los miedos, dando lo mejor de sí para inspirar a otras personas a superarse”.
Avalado, entre otros, por Fernando Botella, Teresa Baró, Patricia Ramírez o Miriam Díaz.Aroca (prologuista),  Pedro nos propone:
- Averiguar cuál es el propósito de tu vida. “El primer paso para conseguir lo que queremos es precisamente saber qué queremos”. Ya lo destacaba Warren Bennis, padre del Liderazgo.
- Salir de tu zona de confort, con 9 propuestas: el momento es hoy, decisión, acción, foco, felicidad, no darle vueltas, optimismo, simplicidad y protagonismo (no ir de víctima, sino de ganador/a).
- Cultivar tu talento: hay un talento natural (predisposición) y uno adquirido (10.000 horas). Víctor Frankl: el talento no lo inventamos, lo “identificamos”. Pedro nos presenta 34 talentos (Gallup) y cinco dominantes (Buckingham y Clifton).
- Entrenar la resiliencia (sobreponerse a los golpes).
- Superar las creencias limitantes (efecto Pigmalion) y aumentar tu motivación (desenmascarando seis falsos mitos y con 12 útiles herramientas).
- Sacar partido a tu Inteligencia Emocional (las personas EI comparten 10 características). “Las emociones positivas nos proporcionan beneficios importantes”.
- Enfadarte menos (“la persona que te enfada te domina”). El cortisol se reduce con buena alimentación, sin bebidas excitantes, sueño, relajación.
- Estirar el tiempo: planificación, concentración, asertividad, consciencia (“haz pronto lo que no te gusta”), delegación, movimiento.
- Decidir ser feliz. El Dalai Lama tiene 18 reglas al respecto (www.guioteca.com/autoayuda/dalai-lama-sus-18-imperdibles-reglas-para-vivir-con-plena-armonia/).
- Estar presente (mindfulness).
- Disfrutar de la calma que da el perdón.
- Dar sin esperar nada a cambio (Generosidad).
- Beneficiarte de la música, del sentido del humor.
En definitiva, Pedro Martínez Ruiz nos ayuda (como dice Sonia Marquès en el epílogo) a que nos atrevamos a “ser quienes somos”. Feliz encuentro, feliz reencuentro.
Un libro claro, conciso y bien escrito, que recoge nuestras prioridades para una vida plena, armónica y feliz. Gracias, Pedro, por este texto.

El autor menciona (y recoge la letra) de ‘Sólo tú’ de Paula Rojo: www.youtube.com/watch?v=v0TFfDw_Q6s “La caja de mis recuerdos,/ los que ya apenas recuerdo/ si tú no estás en ellos…/ Sólo Tú”. “Sólo Tú le das sentido a mis sueños, y haces que ría llorando…”